La educación superior en México ha tenido una trayectoria ascendente en lo general, perceptible sin duda pero intentando llegar a la cita histórica de la pertinencia social y laboral; aunque casi en todos los casos llega tarde a la cita por varios factores que pretendemos abordar en este primer y muy breve recuento.
La pandemia de COVID19 nos trajo a una realidad, con facilidades del internet pero con la falta de materiales y recursos didácticos y una juventud con acceso a redes sociales pero con pocas habilidades en el uso de aplicaciones necesarias para el desarrollo profesional. Hoy el aprendizaje en línea e híbrido muestra tendencia creciente combinando clases presenciales y virtuales, donde los programas educativos (las carreras) se adaptarán a las necesidades individuales de cada estudiante, utilizando inteligencia artificial y análisis de datos.
El COVID 19 nos trajo una realidad, tenemos una juventud con acceso a redes sociales pero con pocas habilidades en el uso de aplicaciones necesarias para el desarrollo profesional
Crece el fenómeno de interdisciplinariedad y colaboración, las universidades deben fomentar la colaboración entre facultades y departamentos para abordar problemas complejos, administrativos, de enseñanza y reducir la duplicidad de uso de recursos y, a la par promover la innovación. Las carencias formativas ahora ligadas al cambio de Modelo Educativo nacional obliga a adaptarse a un modelo usado mucho antes en Europa y que parece ha sido la recomendación desde hace algunos lustros y será la receta en México: el prendizaje basado en proyectos y desarrollo de competencias profesionales.
Aunque se pretende que los estudiantes aprendan a través de proyectos prácticos y experiencias reales, en lugar de solo clases teóricas, se hace necesario reforzar el lenguaje técnico propio de cada disciplina para evitar una brecha de entendimiento generacional y la consecuente falta de nuevos cuadros profesionales y formativos.
Nos toca ya, analizar y formalizar la incorporación de tecnologías como realidad virtual, inteligencia artificial, blockchain y biotecnología en los programas educativos.
Evidentemente se requiere que se legisle para facilitar el acceso y la obtención de pregrados y posgrados ante un flujo migratorio inevitable, creciente y que habrá de reconformar la oferta de profesionales formados en cualquier parte del mundo.
Parte del discurso desde hace varios años ha sido la internacionalización. Con la avalancha tecnológica reciente la educación en línea permitirá que estudiantes de todo el mundo accedan a programas académicos que tendrán mayores exigencias didácticas. Evidentemente se requiere que se legisle para facilitar el acceso y la obtención de pregrados y posgrados ante un flujo migratorio inevitable, creciente y que habrá de reconformar la oferta de profesionales formados en cualquier parte del mundo. La pertinencia de la universidad mexicana será motivada por tendencias de nuestros socios comerciales y en respuesta a esa movilidad y presión demográfica. De esto, se destaca la necesidad de fomentar la colaboración entre universidades y países para abordar problemas globales.
Los programas académicos deben ser flexibles y deben además reforzar las áreas "STEM" (Science, Technology, Engineering and Mathematics), flexibles en términos de duración y estructura para adaptarse a las necesidades de los estudiantes; licenciaturas y posgrados con distintivos como la evaluación y certificación de habilidades y conocimientos se realicen de manera continua, en lugar de solo el título profesional al final de un programa, eso será la ventaja competitiva que permita la pronta inserción al mercado laboral. Con ello, también se debe promover la revisión periódica, en mediano plazo, de los programas educativos para redondear esa pertinencia social y laboral.
Existe el interés del Gobierno Federal Mexicano de incrementar la cobertura universitaria en 300 mil espacios nuevos,
Le debemos sumar, el interés del Gobierno Federal Mexicano de incrementar la cobertura universitaria en 300 mil espacios nuevos, Rosaura Ruiz (titular de la nueva Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e innovación) manifestó en reunión de la LXII Sesión Ordinario de la CUPIA-ANUIES la necesidad de integrar esfuerzos, los centros de invetigación, insituciones de educación superior y los laboratorios nacionales CONAHCYT para lograrlo.
Además, debemos ver un necesario esfuerzo para el acceso equitativo a la educación de alta calidad para todos, independientemente de la ubicación geográfica o el estatus socioeconómico. Esto implicaría establecer programas desde bachillerato o retomar la implementación de porpedéuticos o semestres de "alineamiento" para solventar las deficiencias académicas al ingresar al nivel universitario y reducir con ello la deserción.
Un reto muy importante es proteger ya la privacidad y seguridad de los datos de las comunidades universitarias en un entorno digital, plural, incluyente y de libertades.
Hay más del tema!
Veremos una siguiente entrega...
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